Está científicamente demostrado que los hábitos alimenticios en niños y adultos tienen influencia directa en la aparición de caries dental, una situación que se puede tornar más grave si se combina con una higiene dental deficiente y defectos bucales preexistentes, entre otros factores.

En Clínica Dental J. Queraltó estamos comprometidos con la salud bucodental de nuestros pacientes y lectores. Por ello abordaremos en este artículo cuál es la relación que existe entre la dieta y la caries dental, además de ofrecer algunas alternativas para prevenir esta enfermedad tan frecuente.

Azúcar, un factor clave

Diversos estudios apuntan a que el principal detonante para la aparición de caries es el consumo de azúcar. Es por ello que se le conoce como un “alimento cariogénico”.

La presencia de azúcar en la cavidad bucal actúa como un imán que atrae bacterias dañinas, la cuales se encargan de producir ácidos que eliminan los minerales del esmalte dental, a través de un proceso conocido como “desmineralización”. La pérdida progresiva de calcio y fosfato debilita el esmalte y abre paso a la formación de cavidades bucales.

Signos como el dolor de muelas, molestias al masticar, sensibilidad de alimentos, entre otros, son algunas alertas de una posible presencia de caries, que si no son tratadas a tiempo pueden extenderse a capas más profundas del diente, conduciendo a la pérdida del mismo.

Hace algunos años, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lideró una revisión de estudios relacionados con los efectos de los azúcares en la salud dental. En su informe final precisó que es necesario limitar el consumo de azúcar al 5% de la ingesta energética diaria, que equivale a unos 30 gramos (7 cucharaditas) por día en los adultos. En la actualidad, el promedio supera los 60 gramos al día.

“Picar entre horas” es más perjudicial

Se ha evidenciado que la frecuencia con la que se consumen los azúcares es un factor crítico para el desarrollo de caries. Eso significa que la tradicional costumbre de “picar entre horas” o comer pequeños bocadillos a lo largo del día conlleva un mayor riesgo, incluso si el paciente come de forma saludable y cepilla sus dientes a diario.

Ingerir alimentos o bebidas azucarados con frecuencia afecta directamente el nivel de acidez en la boca, lo que genera una disminución en el pH salival, dando lugar a una mayor acumulación de bacterias debido a que los ácidos no pueden ser neutralizados. Cepillarse después de picotear no es recomendable, ya que podría causar erosión en el esmalte de los dientes.

Los alimentos de textura pegajosa incrementan el riesgo de padecer caries debido a que son los que más tiempo permanecen en la cavidad bucal. Encontramos aquí las golosinas, los caramelos, los dulces horneados, las barritas energéticas y los cereales azucarados. También figuran las bebidas con alto contenido de ácido como los zumos de frutas y los refrescos.

Incidencia de caries en niños

Si bien todo el mundo corre el riesgo de sufrir caries, los niños y adolescentes son más proclives a perder piezas dentales debido a esta afección. En estos casos, la “colonización” por parte de bacterias cariogénicas se presenta más a menudo, pues existe una mayor susceptibilidad de los dientes. El riesgo es mayor si los azúcares quedan retenidos durante mucho tiempo en la cavidad bucal.

Si los niños sienten predilección por los dulces azucarados los padres pueden proponer alternativas más saludables para satisfacer estos antojos, pero manteniendo una buena salud dental. Destacan productos como el yogur, barritas de granola, frutas con bajo índice glucémico (moras, frambuesas, arándanos), plátanos, palitos de queso, frutos secos y otros con bajo nivel de azúcar.

El desafío de cuidar la salud dental de los niños recae en gran medida en sus padres. Antes de los 5 años es importante que un adulto se encargue de realizar el cepillado al menos dos veces al día. El uso de hilo dental también es un aspecto a tener en cuenta, pues contribuye a eliminar partículas de comida que quedan entre los dientes.

Una correcta higiene dental comprende también revisiones odontológicas regulares. La periodicidad tanto en niños como adultos para programar citas con el dentista es cada 6 meses, aproximadamente. Puedes pedir cita en cualquiera de nuestras clínicas a través de este enlace.

Alimentos para prevenir la caries dental

En Clínica Dental J. Queraltó sabemos que hay varios alimentos que funcionan como armas efectivas para luchar contra la caries dental, y que pueden ser de utilidad tanto para niños como adultos. En la lista encontramos las comidas ricas en fibra, como las frutas y verduras, ya que estimulan el flujo de saliva, además de los lácteos como el queso, la leche o el yogurt natural.

Por otro lado, las fuentes de vitamina B e hierro presentes en los granos integrales ayudan a que las encías se mantengan sanas. En el caso de las bebidas, siempre es recomendable hidratarse directamente con agua en lugar de productos azucarados. La clave es llevar una dieta equilibrada.

Ante la presencia de caries u otras afecciones dentales lo más recomendable es acudir a una revisión odontológica. En los tres centros de Clínica Dental J. Queraltó reunimos a los mejores especialistas de toda Sevilla en implantes, periodoncia, ortodoncia, cirugía, entre otros tratamientos. Pide cita hoy mismo con nosotros a través de este enlace.

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