A todos nos gusta lucir una sonrisa brillante y de aspecto saludable. Sin embargo, en ocasiones vemos cómo aparecen manchas en nuestros dientes. Esto se debe a múltiples factores que podemos remediar. Y es que, aunque no lo creamos, con frecuencia somos nosotros mismos los causantes de la decoloración dental.
- La alimentación. Muchas personas saben que el café puede amarillear los dientes. No obstante, hay muchas otras bebidas y alimentos que también provocan decoloración dental. Por ejemplo: los refrescos, el vino, el té, la salsa de soja y el curry. Además, algunas frutas tienen una alta dosis de pigmentación, como los arándanos o las granadas. Por lo tanto, estos alimentos también son causantes de las manchas en los dientes.
- Fumar. Este mal hábito puede producir muchas enfermedades graves. A la larga, también provoca el amarilleamiento, ya que va depositando residuos de color marrón claro que acaban en la estructura del diente.
- Ingesta de medicinas. Algunos medicamentos causan que nuestros dientes se pongan amarillos. Si consumimos antibióticos como la doxiciclina o la tetraciclina durante la infancia, cuando la dentadura se está formando, provocaremos manchas color café o grisáceo. En la adultez, los medicamentos que más afectan a los dientes son los antihistamínicos y los antidepresivos. Hay que leer siempre el prospecto de las medicinas que vamos a tomar, para conocer sus contraindicaciones.
- La higiene. La falta de ella puede convertirse en el principio de la decoloración dental. Es un factor lógico, pero aún así es importante recordarlo. La higiene bucodental debe ser constante y diaria. Además, debe realizarse con un tipo de cepillo de dientes que se adapte a nuestras necesidades.
Por desgracia, no podemos controlar todos los hábitos que provocan la decoloración dental. Hay razones que no dependen de nuestros actos:
- La genética. Se ha demostrado que el color de piel puede influir en el de los dientes. Si tu piel es oscura, tus dientes serán más blancos. Y esto ocurre igual a la inversa. Hay excepciones para esta regla, pero es una tendencia que suele repetirse. Además, cada persona nace de por sí con un color de esmalte más claro u oscuro. Y esto suele ser heredado de sus progenitores. Las personas con dientes gruesos responden mejor a los tratamientos de blanqueamiento, mientras que las que tengan la capa del esmalte más fina, tendrán más probabilidades de padecer decoloración dental. Las personas con el cabello pelirrojo suelen ser más propensas a tener un esmalte fino.
- La edad. Conforme pasan los años, nuestros dientes van desmineralizándose y desgastándose, lo que provoca que se vuelvan amarillos. Pero gracias a unos buenos hábitos de higiene bucodental a lo largo de la vida, este amarilleamiento puede aparecer más tarde de lo previsto.
- Uso de ortodoncia. Llevarla si el dentista lo considera oportuno es de vital importancia. Sin embargo, usarla puede dificultar la higiene oral. El sarro se va acumulando a lo largo del tratamiento, provocando manchas en los dientes.
Soluciones para eliminar la decoloración dental
Aunque la decoloración dental sea una cuestión estética, puede llegar a afectar a la autoestima de las personas, e incluso a la forma de relacionarse con sus familiares y amigos. El blanqueamiento que ofrecen en Clínica Dental J. Queraltó eliminará las decoloraciones y tinciones de tus dientes de forma rápida e indolora.
Cuentan con dos tipos de tratamientos blanqueantes. El primero se logra gracias al uso de una férula individualizada y a una sesión clínica. El segundo es mediante la tecnología LED. Para conseguir el mejor resultado posible, Clínica Dental J. Queraltó valora el tipo de mancha o decoloración que tenga el paciente. Así podrán elegir con exactitud con qué tipo de blanqueamiento acometen el tratamiento.